Tomé el micro y llegué al café La Mira, situado en calle Espejo y Belgrano de la ciudad de Mendoza. Allí estaba ya, mi amigo Walter, y aficionado a los astros. Llevaba un libro del tema. Enseguida le hablé de este texto conseguido en la Biblioteca General San Martín, de Mendoza, nuestra ciudad de residencia. Mira las fotos del planetario de Bs As.
--Ahora hay otro proyector más avanzado. Con él, se puede ver vídeos, y parece que estas en Júpiter o en la Luna. Pero el problema es que marea un poco. Antes sólo se proyectaban las estrellas en una pantalla alrededor de todo el escenario. (Vivió en Bs As).
Luego ve fotos de sendos observatorios de La Plata y de la Asociación Amigos de la Astronomía, de la cual formó parte.
--Estuve en varios observatorios.
A continuación me lleva al tema del radiotelescopio. En este día, había encontrado yo en la red, un plano para construir uno, casero. Se la mandé por chat.
--Se puede hacer , es fácil. Casi menos costoso (en dinero) todavía que uno óptico.
Yo le digo:
--Lo encontré y me emocioné. Esta al alcance nuestro. ¿Te prenderías en hacerlo conmigo?. Porque yo digo que es fácil, ya que se debe hacer un amplificador de radiofrecuencia, con una antena y un sistema de conversión para luego registrar las ondas. ¡Vos sabes lo que sería registrar ondas del sol o de las estrellas!.
--Si, es otro encanto al de los ópticos.
--Yo lo vi y se lo mandé a mi amigo Armando Zandanel, que tiene otro amigo que estudia ingenieria que conoce de radioastronomía. Me va a decir si lo ve para que yo le escriba.
Asi, entonces, pasamos luego a hablar de exoplanetas. Su captación. El sistema binario. Etc..etc..
Otro tema fue el del café astronómico.
---Walter, yo quiero que nos reunamos todos los aficionados en este restaurante, para hacer un café temático sobre esta ciencia. El primer viernes de cada mes. ¿Qué te parece?.
--Me parece bien. Contá conmigo.
Luego hablamos de filtros solares. De la posibilidad de que le compre a él, ya que es proveedor, fliltros para el sol y las nebulosas. Los azules son para nebulosas; los verdes, para planetas. Y el solar no es bueno para el ocular porque-según me dijo- quema el telescopio. También podrían ser peligrosos para la vista. Los ideales son los que se colocan en el frente del tubo reflector. En la parte de adelante. Le conté que pertenezco en la red, a un grupo de observación solar llamado Parhelio. Me comentó que hizo observaciones de la Luna con filtros.
Y otro dato: se ha habilitado en el observatorio de La Punta, San Luis,Argentina, un telescopio remoto para hacer observaciones a través de la cámara web de la computadora de uno. Hay que inscribirse, y se pueden hacer observaciones desde nuestro hogar. Esto hice apenas llegué de la charla astronómica. Una nueva aventura. Ya tengo un turno para ver el cielo, para el diez de octubre.Espero que todo salga muy bien. Aquí en el blog, puse un link al respecto.
Walter tiene tres telescopios. Y además de aficionado a la astronomía, resulta ser un excelente amigo. La velada se prolongó hasta la medianoche. Con un par de milanesas a la napolitana y gaseosas, con buena vibra, y un amor por la ciencia del espacio, inigualable.
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