Hablamos un rato, de cómo empezar a estudiar el cielo. Walter le dio algunas ideas de cómo empezar, a Mariem. Se empieza con un mapa del cielo, y conocer constelaciones. Le mostró fotos de astros, y un video de la luna, muy bueno. Una filmación de los cráteres, mares, etc.Mariem, muy contenta.
Luego vino Silvia con su esposo. Se charló sobre nuestras vidas, un poco. Nos hacemos amigos. Silvia comenta sobre su afición a la astronomía, cuándo comenzó, y la recolección de meteoritos que hizo. Vive en Vicuña Mackena, provincia de Córdoba. Suele estar en Mendoza, casi todos los meses, porque tiene acá, a su hermana, sus hijos y nietas.
La charla se matizó con una picadita, que nos ofreció Walter. No faltó hablar de telescopios, de geología planetaria, de meteoritos, etc....
Al rato, ya nos preparamos con el telescopio
Dobson, de Walter, para subir a la terraza del edificio. Llevamos un par de prismaticos, también. El mio y de Pablo.
Dobson, de Walter, para subir a la terraza del edificio. Llevamos un par de prismaticos, también. El mio y de Pablo.
Instalados en la terraza, Mariem fue la primera en "lanzar el fuego",para las observaciones. Saturno, fue el primer elegido. ¡Qué hermoso!. Con la división de Cassini, y Titán, su satélite más grande.
Luego apuntamos con los punteros láser, a varias estrellas. Yo, le mostré a Mariem, Marte. Al Norte, a buena altura,sobre el horizonte. Spica, de Virgo. Walter apunto el Cúmulo de Ptolomeo, en Escorpio. El Joyero, en la Centauro. Y relataba el tipo de estrellas, su juventud, los cúmulos y las hipernovas. Eta Carinae. Entretanto,algunos chistes, y cuatro o cinco fotos de nosotros,posando.
El frío empezaba a arreciar. Llevábamos un par de horas, conversando, y viendo el cielo. Llegó una gran nube, y la velada observacional, llegaba a su fin. Vimos más galaxias, con los datos de Walter y algunos mios.
Desmantelamos el telescopio, con su lámpara roja-esencial para la noche- pora bajar al segundo piso, y comer unas pizzas. Allí, vimos un mapa celeste, en la computadora, y conversamos otro rato de astronomía, y otras cosas. Una tertulia llena de alegría, y conocimiento.
Para las dos de la mañana, terminaba la reunión del grupo El Firmamento. Una nueva miembro, Mariem Belavita, joven que le interesan los astros y volverá a ver el cielo con nosotros, seguramente.
Ya estoy ahí...
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