Me levanto a las seis. Noto que aún esta oscuro, la noche esta terminando. Y saco a mi telescopio Antares, al frente del edificio. Mias gata, tambien salen conmigo. Andan huzmeando. Coloco a mi Antares, en dos o tres posicions, casi vertical. En Cenit, ya que el gigante se hallaba casi a 90 grados, Norte, sobre el horizonte. Má arrbia aún, esta Saturno. Lo maniobo,con dos oculares. Uno de 20, y otro de 12.5.No logro ver nada. Me doy cuenta -a traves de todas estas observaciones- que mientras un astro está másl alto sobre el horizonte, es más dificil caparlo. Media hora, y bue....me doy por vencido. Está fresco,y no hay que resfriarse en la epoca del virus más mundial de la historia. El coronavirus aún esta entre nosotros. Continua asustando. Pero yo, sólo pienso en mis planetas. Y no tengo miedo . Eso si, tampoco puedo exagerar. Por eso, a las seis y media y con una temperatura de 10 grados, dejo de mirar.
¡Buenso y despejados cielos para todos!
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